La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado el 21 de septiembre, Día Mundial del Alzheimer, enfermedad neurodegenerativa que altera lentamente el funcionamiento normal de los procesos cognitivos y la conducta de la persona y, gradualmente, la lleva a perder su capacidad de poder llevar una vida autónoma e independiente en el ámbito personal, familiar, laboral y social.
La vida de un enfermo de Alzheimer se caracteriza por ser “una vida sin recuerdos” y su pérdida de la memoria lo transforma hasta llevarlo a sufrir por algo que él solo imagina y por no poder disfrutar de lo bueno que cada etapa de la vida presenta. El enfermo de Alzheimer es una persona extremamente vulnerable a la que nuestra sociedad debe tutelar, previniendo la posibilidad de cualquier tipo de abusos que podrían sufrir y protegiéndolos, invirtiendo en esto recursos humanos y económicos.
Los datos estadísticos resaltan que con el avanzar de la edad aumenta la posibilidad de quedar afectados por el Alzheimer, por lo que, sobre todo en los países con un alto número de personas mayores, esta enfermedad repercute en todo el ámbito familiar de la persona afectada que tiene que enfrentar situaciones emocionalmente dolorosas y exigentes en el cotidiano vivir para acompañar a sus seres queridos enfermos.
El día mundial del Alzheimer, tiene como finalidad dar a conocer las necesidades de los enfermos y ofrecerles terapias de estimulación para la memoria y ejercicios mentales, propiciarles formación y apoyo, tanto a las personas que sufren la enfermedad como a sus cuidadores, investigar sobre el Alzheimer y sus tratamientos y promover campañas de prevención de la enfermedad, trabajando en los factores de riesgo modificables.
Con esta ocasión, a nivel de distintas realidades, se realizan varias iniciativas para mentalizar sobre esta enfermedad que, antes o después, puede tocar la vida de cada uno, para que en la medida de lo posible se pueda ayudar a prevenir los efectos devastadores de la enfermedad en la persona y en la sociedad y crear una red de asistencia integrada que acompañe al enfermo y a su familia en la dura experiencia que les toca vivir.